NIF, CIF, DNI, NIE… Hay numerosas siglas que cualquiera que quiera vivir y trabajar legalmente en España debería conocer. Sin embargo, la cantidad de abreviaturas puede ser abrumadora para un principiante. Por eso hemos decidido preparar una pequeña guía para ayudarte a descifrar las misteriosas siglas, aclarando su significado y explicando su importancia.
¿Qué tienen en común el NIF y el DNI?
Para entender bien el concepto del número de identificación fiscal (NIF), primero conviene detenernos un momento en las funciones que cumple el DNI. El documento nacional de identidad sirve, sobre todo, para certificar la identidad y la nacionalidad de un ciudadano español. Gracias a este documento, puedes saber quién es su titular y cuáles son sus datos personales básicos.
El número de identificación fiscal cumple una función similar, pero a efectos fiscales. Es decir, el NIF permite saber quién es, y además, cuál es el domicilio fiscal de la persona con la cual se va a hacer negocios. Siendo un código expedido por el Estado, asegura a las contrapartes la máxima seguridad, lo que es muy importante de hacer negocios.
¿Quién necesita el NIF?
Si quieres llevar a cabo operaciones a efectos tributarios y aduaneros, el NIF te será indispensable. Pero, ¡ojo! Dependiendo de si eres una persona física o jurídica, español o extranjero, tu número de identificación fiscal será diferente.
NIF: ejemplo de una persona española residente en España
Para conocer el NIF de una persona española residente en España, basta saber cuál es su DNI, ya que ambos documentos comparten los mismos dígitos y la misma letra final (código de control).
NIF para las personas sin DNI
Pero no todas las personas con nacionalidad española necesariamente poseen DNI. El primer caso son los menores de 14 años que viven en el país, el segundo: los residentes en el extranjero. Si estas personas necesitaran obtener el NIF, deberían pedir la asignación de este número de forma voluntaria. El NIF de los menores empezará con la letra K, mientras que el NIF de los residentes en el extranjero comenzará con la letra L.
NIF, NIE: identificación fiscal de los extranjeros
¿Qué pasa con los extranjeros que viven en España y necesitan un NIF? Buenas noticias: el DNI no es obligatorio para obtener el NIF, por lo que las personas extranjeras sin nacionalidad española también pueden tenerlo. En este caso, el NIF será exactamente igual al número de identidad de extranjero (es decir NIE) emitido por la Dirección General de Policía. Este se compone por una letra inicial, siete números y una letra final (código de verificación).
NIF para los extranjeros sin NIE
Si eres una persona sin nacionalidad española y sin NIE que necesita llevar a cabo algunas operaciones de naturaleza tributaria, también tienes derecho a obtener un número NIF. En este caso deberías acudir a la administración tributaria y solicitar la asignación de un NIF de forma voluntaria. El NIF de un extranjero carente del NIE empezará por la letra M.
NIF: empresa, autónomos y modelos que presentar
En las facturas emitidas por los autónomos, es necesario que figure el número de identificación fiscal. ¿Qué número es ese? Es simple, el NIF de tu empresa se corresponderá con el número de tu DNI (si eres español) o de tu NIE (si eres residente extranjero).
NIF para las personas jurídicas
El número de identificación fiscal de las personas jurídicas está compuesto por 7 números y un código de control que puede ser o bien una letra, o bien un número: todo depende de la naturaleza jurídica de la entidad. Por ejemplo, la letra A es para las sociedades anónimas, la Q para los Organismos Públicos, la N para las entidades extranjeras, etc.
¿Cómo puede solicitar el NIF una persona jurídica? Es sencillo, debería acudir a la Agencia Tributaria (o realizar los trámites por vía telemática) y rellenar el modelo 036 marcando las casillas requeridas. Además del formulario, tienes que presentar la documentación exigida.
CIF y NIF: diferencias y semejanzas
Todavía no hemos hablado del CIF, es decir, el código de identificación fiscal. La razón por la que hemos dejado el CIF para el final es simple: este número ha dejado de estar vigente y simplemente ya no se usa. Con el Real Decreto 1065/2007 del 27 de julio, el CIF se vio sustituido por el NIF y desde el 2008 no tiene valor legal. Antes de esta fecha el CIF cumplía la misma función que hoy desempeña el NIF – servía para identificar a las personas jurídicas a efectos fiscales. No está de más saber qué era el CIF, pero al mismo tiempo recuerda que este número ya ha quedado en el pasado.
El NIF, es decir el número de identificación fiscal, es un concepto que debe tener claro cualquier persona que necesite llevar a cabo una operación de carácter tributario o aduanero. Esperamos que nuestra guía te haya sido útil, que hayas entendido el concepto del NIF y que tengas claras las diferencias que hay entre los múltiples números españoles utilizados para identificar personas y empresas.
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