Seguro que más de una vez te has preguntado para que sirve exactamente el famoso CVV de tu tarjeta de débito, crédito, prepago o pago online; efectivamente, esa cifra compuesta por tres o cuatro dígitos que has de introducir cada vez que realizas un pago digital.
Pues bien, el CVV (Card Verification Value) es un código de seguridad o validación situado normalmente en la parte posterior de la tarjeta de crédito y que evita el uso fraudulento de la misma, pues corrobora que quien emplea un número de tarjeta determinado para realizar un pago está realmente en posesión de esta. Este código, al igual que la fecha de caducidad, que también debes indicar cada vez que realizas un pago online o cualquier transacción telefónica, es único para cada tarjeta y está asociado a una determinada cuenta bancaria.
- El CVV sirve para reforzar la seguridad en el uso de tarjetas bancarias en medios de pago online.
- La impresión plana del código trata de impedir que se pueda copiar si se intenta clonar la tarjeta.
- El CVV no aparece en la información que contiene la banda magnética, tampoco en los recibos de compra o facturas de pagos efectuados con la tarjeta.
Métodos de validación adicionales
Otro método de validación que trata de reforzar la seguridad proporcionada por el CVV para nuestra tarjeta de crédito es el código de seguridad o contraseña que nos llega al móvil cuando efectuamos una compra virtual, clave sin la que no podemos dar por finalizada la operación de compra y que, sin duda, es un paso más para poner a salvo nuestro dinero.
El CVV, también conocido por las siglas CVC (Card Verification Code), es imprescindible a la hora de pagar con tecnología mobile wallet, es decir, a través de aplicaciones telefónicas que nos permiten realizar transacciones con nuestro smartphone, dispositivo en el que nuestra tarjeta bancaria aparece accesible de forma virtual. Este tipo de aplicaciones, desarrolladas por diversas entidades crediticias y financieras, nos permiten, además, consultar los movimientos de la tarjeta o bloquearla en caso de robo o pérdida para aumentar así nuestro control sobre la misma.
En CréditoSí también apostamos por la seguridad tecnológica para garantizar la protección de tus datos personales cuando pides un microcrédito o minicrédito con nosotros, porque sabemos que la transparencia y la seguridad son imprescindibles para conquistar la confianza de todos aquellos consumidores que quieren mantener su crédito a salvo.
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