El endeudamiento entendido como el conjunto de obligaciones de pago adquiridas con un tercero, sea una entidad o una persona, se convierte muchas veces en la única opción cuando tus ingresos y ahorros no bastan para adquirir algo que necesitas o quieres. No obstante, has de ser responsable al adquirir este tipo de obligaciones para evitar caer en un sinfín de deudas que aumenten de manera descontrolada y acaben afectando a tu economía y tu salud.
Piensa antes de actuar
Antes de adquirir un préstamo, valora qué tipo de deuda conviene adquirir de acuerdo con tus necesidades. Busca a conciencia entre los tipos de créditos ofrecidos por diferentes entidades bancarias y haz una comparativa de costes y beneficios.
Después de realizar un buen análisis comparativo de las tipos de interés, los costes adicionales (como las comisiones de gestión y los seguros de vida), los pagos mínimos mensuales, la fecha a la que se puede aplazar la deuda, la posibilidad de hacer pagos por adelantado y las sanciones aplicables en caso de atrasarse en los pagos; podrás tomar una decisión más adecuada a la hora de endeudarte, ya que al conocer todas las obligaciones del préstamo tendrás mejores herramientas para involucrarte de manera responsable en ese compromiso.
Estrategias para un buen control de tus deudas
Ahora bien, hay algunas estrategias que se pueden aplicar para tener un buen control del endeudamiento financiero cuando tienes varios créditos a la vez:
- Conoce exactamente el importe total adeudado sumando todas las deudas que tienes en el momento.
- Clasifica las deudas por su importe, teniendo en cuenta las tasas de interés y los gastos adicionales.
- Identifica el dinero que te queda después de separar tus ingresos fijos mensuales y el promedio de los gastos obligatorios (alimentación, transporte, alquiler, etc.). El excedente es el que podrás destinar al pago de las deudas.
- Elige una forma de acelerar el pago de las deudas. Algunos métodos conocidos son el método avalancha, que consiste en pagar en primer lugar la deuda con la tasa de interés más alta y continuar con las siguientes en orden descendente, o el método bola de nieve, que se basa en liquidar la deuda de menor cuantía continuando con la siguiente en orden ascendente.
Buscar alternativas
Otra opción es buscar maneras de bajar los intereses, por ejemplo negociando con el banco la reducción de intereses, ya sea redefiniendo el plazo de la deuda, tomando otro préstamo con menor tasa de interés que cubra el valor adeudado por otro crédito o consolidando las deudas. También puedes buscar opciones en otros bancos, como la compra de una cartera que permita transferir las deudas de un banco a otro, eso sí, siempre que sea con un interés más bajo. Esta alternativa se debe analizar con detenimiento, ya que, si no se hace con el debido cuidado, podría terminar llevándote a un espiral de deudas.
Finalmente, ten presente que, además de procurar siempre firmar contratos de pago viables dentro de tus posibilidades para que tu estado de endeudamiento esté bajo control; también puedes empezar a organizar tus finanzas personales. Evita hacer compras compulsivas, usa las tarjetas de crédito de manera responsable, cancela los servicios que no sean indispensables (tv por cable, Netflix, Spotify, plan móvil, etc.) o, en su defecto, busca alternativas más económicas. Piensa en opciones para obtener dinero extra, haz un seguimiento estricto de tus ingresos y gastos y ten una mentalidad ahorradora para no endeudarte más de lo necesario.
Ver más: Mini créditos y Mini préstamos